martes, 11 de marzo de 2008

El pobre español

Bueno, empiezo diciendo que soy traductor. Quizás por eso es que tengo una debilidad por el buen uso del español. Y no quiero decir que yo ande por ahí hablando como si fuera Andrés Bello reencarnado. Pero creo que tengo buen español y que manejo bien las reglas de mi idioma materno. Pero lo que sí que no puedo soportar es una persona que hable y/o escriba terriblemente mal. Sobre todo si esa persona ha estudiado. Digo, creo que uno puede perdonar si una persona que nunca ha estudiado hable y/o escribe mal. Se perdona. ¿Pero que alguien haya estudiado en la universidad y vaya por ahí diciendo Habían personas o escribiendo Pezcado o Reloje? No, no. Eso sí que no.
Pero bueno, creo que me quiero referir, después de tanta vuelta, al uso de cuyo. ¿Por qué casi nadie usa cuyo? ¿Por qué ha caído en el más horripilante de los olvidos?
Se me sube la sangre a la cabeza cuando oigo a alguien decir: "Ésa es la vecina que su hija estudia medicina". !Señor! ¿Será posible? ¿Es que no se puede aprender a decir: Ésa es la vecina cuya hija estudia medicina o Ésa esa la vecina que tiene una hija que estudia medicina.
Claro, yo sé que ésa última solución suena como más enredada, pero es correcta en lo que a gramática se refiere.
He oído mucha gente decir que no usa cuyo solamente porque "es muy pesado". Está bien. Sí. Puede sonar pesado. Pero entonces deberían usar otra construcción que sustituya el cuyo, para evitar esa horrible construcción. Otro ejemplo: "¿Te acuerdas del médico que el hermano se casó con la señora que su tío se murió de cáncer?
Creo que lo que sucede con el español y con la ortografía es que mucha gente siente un verdadero desdén cuando de hablar y escribir bien se trata. Uno oye decir cosas tan sorprendentes como ésta: "Pero es lo mismo". No. No es lo mismo. No, no y no. Los acentos y las comas existen por una razón.
Me molesta que a la mayoría le parezca peor un error en matemáticas y/o física que un error de ortografía.
Ejemplo:
Yo: -¿Cuánto es que da 25 x 5?
Fulano: -125. Por favor...
Yo: -Ah ok.
Fulano: -¿Cómo puedes preguntar eso? Es tan obvio.
Yo: -Bueno, sí.
Ejemplo 2:
Fulano: - Mira este parcial de (la materia que sea). Saqué 14.
Yo: - Para ver... Ah, está bien. Por cierto, algún lleva acento
Fulano: -Ah pues... pero si es lo mismo.
Yo: -No, no es.
Fulano: - Se entiende igual.
Yo: (para mis adentros) O sea...
¿Se entiende?
¿Por qué tanta indiferencia ante el español? Todos deberíamos amar nuestra lengua materna. Es más, me sorprende que la gente se molesta más cuando se equivoca en un idioma que está aprendiendo que cuando no sabe hablar español. Me imagino que eso pasa porque la gente, dentro de todo, se hace entender en su idioma materno. Pero ésa no es la idea. Hay que cultivar el idioma.
Y lo digo porque tengo muchos años enseñando idiomas. A la gente le parece horrible decir equivocarse y decir I doesn't understand y ponen cara de pecado mortal, pero les da igual decir Habían personas que no sabían o Desde el punto de vista de los contenedores de basura. ¿Acaso en más importante el idioma extranjero que la lengua materna? No. Un rotundo no.
Antes de terminar quiero expresar mi mayor indignación por un fenómeno asquerosamente espantoso del español de Venezuela. Mucha gente sufre de este mal y lo peor de todo es que creen que se la están comiendo. Me refiero al feísimo y despreciable "el mismo". Y tambiuén me refiero a cualquiera de sus variantes: la misma, los mismos, las mismas. Qué cosa tan fea. ¿Será posible? A ver, yo no dudo de que "el mismo" tenga un uso en el buen español, pero el modo como se usa aquí es totalmente repetitivo y, lo que es peor aún, innecesario.
Ejemplo:
(Metro de Caracas. A cualquier hora) "Se les recuerda a los señores usuarios que deben abstenerse de cruzar la raya amarilla. Recuerden que la misma es el límite de su seguridad".
¿Por qué, Dios mío? ¿Por qué? ¿Para qué repetir el referente? ¿No se entiende igual diciendo: (...) de cruzar la raya amarilla. Recuerden que es el límite de su seguridad? Claro que sí.
Tengo otro ejemplo peor. Éste lo oí en un banco y casi me voy en vómitos:
Cajera: -Mira, tienes que llenar una planilla de depósito en Bs. F y otra en Bs., por cuanto los mismos no se pueden depositar en la misma planilla.
¿Por qué, Dios mío? ¿Por qué estos empleados de banco se empeñan en usar en el español hablado expresiones del español escrito? No se dice POR CUANTO. No. No intenten cubrir con frases rimbombantes su falta de educación y su pobre español. Y ya no voy hablar sobre el horrible los mismos. Creo que quedó claro.
Saludos.

1 comentario:

Keyser Soze dijo...

¿Y qué me dices de ese barbarismo horrible que es el uso de la letra "s" al final de los verbos en presente?

Yo odio cuando gente supuestamente educada, culta y fina te dice, "Oye, ¿me trajisteS los documentos?"; "¿Le dijisteS a tu hermano?; "Me gustó mucho lo que me comprasteS"... Señores, ¡eso no existe! ¡Es un error!

Otra que escucho mucho en el mundo de los negocios es "Aperturar". Por Dios, animales brutos, el verbo es "Abrir", sólo existe la palabra "apertura", pero el verbo NO es aperturar, es abrir. Entonces no se puede decir "Aperturamos dos nuevas tiendas", por favor, se dice "Abrimos dos nuevas tiendas" y ya.

Por último, una muy común incluso en el periodismo (tanto escrito como audiovisual) y la publicidad es "Nivel nacional" o "Nivel internacional". Señores, la palabra nivel se refiere solo a ALTURA, no puede ser usada en otro tipo de dimensiones, es "el ámbito nacional", "a escala internacional", etc. etc.

Ah, y ni hablar del uso de los signos de exclamación o interrogación sólo al final de las oraciones. OK, en un mensajito de texto o un chat es aceptable, porque al final es una conversación informal, pero este error es cada vez más común en la comunicación impresa, en publicidad, en TV, etc. Es una imitación imbécil del inglés. Señores, en español es necesario el uso de los signos de interrogación y exclamación tanto para abrir como para cerrar las oraciones. En inglés no hace falta porque las oraciones se construyen de manera diferente cuando son preguntas o exclamaciones, pero en español la construcción es igual, por lo cual hace falta la herramienta.

Pero, ¿tú sabes qué, Mr. Filth? Todo eso pasa simplemente porque la gente no lee. Y lo poco que leen son periódicos en donde la mayoría de mis colegas periodistas cometen estos mismos errores. Tú y yo conocíamos la mayoría de estas reglas muchísimo antes de llegar a la universidad. ¿Por qué? ¿Porque somos mejor educados que los demás, o más privilegiados? Pues no, porque no lo somos. Es simplemente porque desde carajitos nuestros padres nos inculcaron el gusto por la lectura. That's it. As simple as that, my dear Watson...